En mi apunte anterior, te comentaba que para tener la visualización completa de «algo», es necesario trabajar por marcos y cada uno de ellos, tiene sus propios elementos.

Una investigación científica, se puede manifestar de tres formas: cuantitativa, cualitativa o mixta. Es decir, la manera en que vas a considerar tu investigación. Cada una tiene sus propias características.

Estos tres enfoques, comúnmente no nos lo enseñan en el primer curso de Metodología de Investigación. ¿Por qué? No lo sé, pero es indispensable saberlas y aplicarlas en una investigación, porque no todas las investigaciones se desarrollan igual, en algunas vamos a investigar temas que no se pueden cuantificar, otros sí y otros pueden ser mixtos. Más adelante, te voy a compartir más sobre estos enfoques.

Por el momento, vamos a refrescar ¿en qué consiste el marco conceptual?. Esto no es nada más ni nada menos que definir claramente qué vamos a investigar. Quizá hayas escuchado una frase fresa que dice «ve a la librería, cómprate un mapa y ubícate». Esta frase se puede aplicar acá, necesitamos «ubicarnos o ubicar» al lector en nuestra investigación.

Veamos la imagen. Acá está Juancho o puede ser cualquiera de nosotros «tratando» de recordar primero qué es un marco conceptual, luego qué elementos debe llevar y por último desarrollarlo.

Si te das cuenta en la señalización tiene varias flechas con diferentes preguntas. Estas preguntas son las que debemos hacernos al tener una idea y nos preguntaremos, a quién afecta, qué pasa, cuál es el problema, dónde sucede, cuándo lo vamos a desarrollar, por qué queremos desarrollarlo, cómo beneficiará.

También, podemos visualizar que Juancho tiene varios caminos y no sabe cuál escoger. ¿Porqué crees que está indeciso? Yo diría que tiene una idea general pero no sabe cómo responder las preguntas de la señalización. Por eso, es indispensable «delimitar la idea, tópico o tema».

Ejemplifiquemos: Juancho tiene la «idea general» para realizar su trabajo sobre el tema «Ambiente». Agatha le dice, ¡Esto es muy amplio!, deberías delimitar tu idea, así puedes hacer un buen trabajo y no te pierdes en el camino. ¿Qué tal si lo delimitas así? Contaminación del medio ambiente, ecosistemas del ambiente, importancia del medio ambiente, juegos para niños y proteger el medio ambiente, la conservación del medio ambiente; te sería mucho más fácil trabajar y ser más específico. Juancho, le responde. ¡Tienes toda la razón, porque siempre estoy investigando lo que me gusta, pero soy más puntual!. Gracias, por la sugerencia.

Veamos lo que Juancho, tendría que hacer:

Lo primero, tiene que identificar qué va a investigar y pensará ¿Qué voy a trabajar?. Esto es el planteamiento básico del problema. Puede ser una preocupación, un asunto, algo que requiere solución, algo que le interese. Dentro del planteamiento del problema, deberá desarrollar las preguntas de investigación.

Con base a esto, Juancho, va a generar el título de su investigación, la cual puede ser susceptible de cambios. Agatha le recuerda, está debes enunciarla de manera sencilla y clara. Sugiero, la redactes luego de tener las preguntas que continúan en el esquema que hemos realizado.

Segundo, debes preguntarte dónde, cuándo, a quién afecta. Es decir, la delimitación en área geográfica, período que abarcará tu estudio, tipo de población que vas a investigar y será tomada en cuenta. También, puedes formularte el nivel o sector temático o institucional de la investigación. ¿Comprendes? Juancho, le responde, dame unos minutos y hago un borrador de mis ideas antes que se me olviden, a lo cual Agatha accede.

Luego de unos minutos, le dice Agatha, como tercer punto tenemos los objetivos de la investigación. No es nada más, ni nada menos que la finalidad de señalar lo que aspiras o quieres en la investigación. Deben redactarse con claridad, pues son las guías del estudio. Recuerda que es un general y tres específicos. Los cuales deben redactarse con verbo en infinitivo. ¡Sí, de eso me recuerdo bien!, le responde Juancho con gran determinación y se sonroja.

-No te desesperes, ya vamos terminando, le dice Agatha. A continuación, te vas a preguntar por qué y para qué de tu investigación. Los maestros, le dicen justificación. Acá, vas a exponerse los antecedentes o referencias de estudios similares o acerca del mismo tema, se debe decir que te mueve o los mueve a realizar la investigación, cuáles serán los beneficios para la sociedad y transcendencia académica. Siempre redactada de una manera clara y concisa ¿Vamos bien?. Juancho, le responde: Mmmmm creo que sí. Aunque te diré que con la práctica, se me hará cada vez más fácil y sonríe.

¡Eso está bien!, ¡Todo es cuestión de práctica, Juancho!, le anima Agatha. Como punto final, tenemos viabilidad. ¡Puchis, Agatha! ¿Qué es eso?, Nunca lo había escuchado, le interrumpe Juancho. Por la forma de expresarse, Agatha se ríe a carcajadas. Luego de un rato, le responde. Este es otro punto importante en tu trabajo y muchas veces no lo tomamos en consideración. Quieta esa expresión, repara Agatha.  Lo que sucede es que puedes tener una idea muy buena, pero si no tienes acceso a cómo investigarlo, no te servirá de nada. Esto significa, que debes desarrollar un tema que no solo te guste
para llevarlo a cabo, sino también contar con los recursos necesarios para llevarlos a cabo. ¿Me comprendes?

Luego de una tarde muy fructífera, los dos amigos descansan plácidamente. Juancho, contento porque sabe que cuenta con Agatha que le apoyará y resolverá sus dudas. ¿Para qué son los amigos?

¿Fácil o difícil?

Imágenes tomadas de:  http://pinceladasceremonia.blogspot.com, http://b2bdigital.net/2013/04/04/the-one-thing-every-marketer-must-do, http://pixabay.com/es/gato-y-perro-amigos-gato-perro-775116/

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